Algunas veces tenemos que estar preparados para ver el retrovisor.
Basta con ver la parte trasera de mi coche para darse cuenta que no sé utilizar el retrovisor. Normalmente me cuesta muchísimo trabajo calcular la distancia de las cosas y vergonzosamente, lo que para otros es algo tan fácil para mí, manejar, resulta una pesadilla. Pero este post no es para hablar de mis dotes automovilísticos (que no tengo) sino para darle mantenimiento a los dotes importantes
Vivir, aprender y recorrer el camino aunque este no sea el correcto.
Tremendo susto que me llevé al casi chocar con un muro de contención por no utilizar el retrovisor, me hizo reflexionar sobre algo que he venido haciendo durante mucho tiempo. !No se dar reversa! Y antes de que me tiren de tomatazos les diré que "la reversa" es importante y no solo en los automóviles.
Algunas veces nos programan desde niños a temerle al pasado "Para atrás ni para agarrar impulso" la frase típica de mi mamá que me acompañó durante mucho tiempo y que desde hoy trato de re-diseñar. La realidad es que para avanzar sí necesitamos ir para atrás, sobre todo cuando nuestro camino se enfrenta a una calle sin salida, no puedes estar aferrado a seguir en donde hay una pared, por más que aceleres terminarás en el mismo lugar con las llantas desgastadas y sin gasolina.
Si de alguna forma sientes que por más que das lo mejor de ti las cosas no cambian, es tiempo de ver tu retrovisor y prepararte para dar reversa. Sé que algunas veces cuesta trabajo, más cuando te encuentras en la obscuridad. Por más que le temas a ese fantasma en tu retrovisor, es tiempo de agarrar valor y verlo fijamente, te darás cuenta que el único espíritu chocarrero de ese lugar eres tú, tratando de avanzar en una dirección incorrecta.
Pero antes de que te avientes en reversa como carro de rápido y furioso; te diré que analices muy bien los obstáculos que enfrentaste para llegar hasta donde estas, viéndolos desde otro ángulo podrás esquivarlos de una forma estratégica. Asegurándote así, que ni tú ni los que te rodean salgan lastimados. Te darás cuenta que hasta los obstáculos más difíciles te pueden llevar a un camino mucho más frondoso.
Es importante que mientras enfrentes a tu pasado enciendas las intermitentes de precaución. Recuerda solo estás utilizando la reversa para tomar una nueva dirección y no para vivir en reversa. Cuando hagas el reto del retrovisor platícame que ruta trazaste, estoy segura que será la correcta ¿y sino? ya sabes como dar reversa. #desocupadamente